14.4.12

San Basilio de Palenque


Recuento fotográfico de un viaje a San Basilio de Palenque en el departamento de Bolívar, Colombia.

Esta fue mi experiencia yendo al que, cuenta la leyenda, fue el primer pueblo libre de América. Palenque, llamado así por las palizadas que en otras épocas sirvieron de defensa contra los ataques de la autoridad colonial, y que hoy adornan los patios de las casas del pueblo.



Algo que considero importante antes de ir a Palenque es ir recomendado, o si es mejor, con alguien oriundo de allá. Es un pueblo y familiar donde la verdadera riqueza del pueblo está en su gente. No hay hoteles.

Una forma de llegar a Palenque desde Barranquilla, siguiendo la guía de nuestro amigo Manuel Cassiani, es tomar la calle 30 hacia el sur del departamento del Atlántico, pasando por Ponedera, Campo de la Cruz, Suan y luego en Bolívar, cruzando Calamar y siguiendo la vía hasta llegar al cruce de Carreto donde, en nuestro caso, tomamos un bus intermunicipal en su trayecto a Cartagena.

Luego, cerca a Malagana, se observa un camino de tierra a un lado de la carretera donde se apuestan motos que llevan a Palenque. El pasaje en moto es económico, recuerdo que eran como $2.000.





Se pasa por la casa de Petrona Martínez y por fincas ganaderas con el verde propio de las sabanas de Bolívar, hasta llegar a la plaza, donde se encuentra la famosa estatua de Benkos Biohó. Este personaje fue quien, según la leyenda, lideró la resistencia de los esclavos y fundó Palenque como primer pueblo de negros libres en América.



Unas cuantas cuadras más adelante, nos bajamos donde Tania, nuestra anfitriona, que nos recibió con un delicioso sancocho a leña en su patio. Allí también conocimos a Epifanio, su primo. Estos jóvenes de Palenque son unos berracos, se desempeñan en diversos oficios para mantener a su familia. Tania estudia pedagogía y la ejerce como profesora, es cocinera, vende bolis, hace peinados típicos palenqueros. Epifanio también está estudiando, es guía etnoturístico del pueblo y para pagar su transporte, todos los días sale madrugado a ordeñar leche que vende a una quesera del pueblo.




Eso hicimos al día siguiente, nos levantamos a las 5 de la mañana, y fuimos a buscar las vacas para ordeñar lo del día. Caminando hacia el monte, desayunamos en un puestico callejero, y nos dirigimos hacia los corrales. Al llegar nos encontramos con que las vacas se habían salido del corral durante la noche.

Empezamos a caminar por un tiempo considerable entre los montes, con el aire fresco de la mañana, buscando las vacas en todos los corrales. Cuando las encontramos, Epifanio empezó a arriar el ganado de vuelta a su corral, entonando lo que me parecieron sencillos cantos de vaquería, mencionando a todas las vacas. Tenían nombres como Blanquita, o Barranquilla.








Cuando por fin entramos los animales en su corral, ya el sol iba subiendo a media mañana. Ordeñamos, o bueno, Epifanio ordeñó, porque descubrí que no soy muy bueno en eso; se llenaron dos baldes y de vuelta al pueblo, pasando por la quesera, donde cada sábado le pagan por ordeñar la leche de una semana. Otra parte de la leche ordeñada es para su casa.

Al entrar al pueblo, volviendo desde el monte, pasando por el famoso arroyo de Palenque, viendo a las lavanderas en su otro lado del arroyo (hay zona para hombres y zona para mujeres), de alguna forma me sentí más cercano a ellos. Los viejos en su burro que ya habían ido y venido de sus tareas campesinas, me miraban con aire de aprobación, como "Este turista se metió al monte a ordeñar. A vaina." Respectivo baño con totumo y agua del pozo en el patio, y a caminar el pueblo, conocer sus personajes, su vida cotidiana.

El pueblo es sencillo, con calles polvorientas. No hay acueducto ni alcantarillado. Sobreviven pocas casas de bahareque y palma, pues poco a poco se ha ido construyendo en 'material'. Me dolió ver que había bastante basura.

En la plaza, al pie de la estatua se reúnen los hombres del pueblo a echar cuentos. Como buen fin de semana que era, había un picó amenizando cada cuadra. Por las calles juegan niños, las niñas pequeñitas ya vienen bailando con el sabor que sólo da la sangre africana, los jóvenes juegan dominó, los viejos se sientan en sus mecedoras en la puerta de la casa. Una postal costumbrista.





Para esos días en Cartagena se estaba dando la Cumbre de las Américas, por lo que las Alegres Ambulancias no estaban, pero si estaba el señor Evaristo Márquez, "conocido internacionalmente por su interpretación del personaje José Dolores en la película Queimada (1969), con Marlon Brando y dirigida por Gillo Pontecorvo." con quien nos sentamos a hablar un buen rato.


A la hora del almuerzo recargamos energías con un arroz de cerdo campesino, hecho por Tania. Más tarde, con la guía de Epifanio, también conocimos al señor Rafael Cassiani, líder del Sexteto Tabalá, que nos habló, con una sonrisa de oreja a oreja, del orgullo de su Sexteto y de la nueva generación de músicos palenqueros.

Conocí a Sikito, un viejo curandero del pueblo que maneja la medicina tradicional, y además es compositor. Después de hablar un rato con el viejo, cantó, e incluso me hizo un bautizo. Me traje como recuerdo una botella de su mezcla de hierbas medicinales. También fuimos donde 'El indio', un indígena que vive en el pueblo y que hace ñeque, (licor de caña) a conocer el proceso, pero no estaba. Para luchar con el calor, unas frías en la tienda.





De noche, parecía que el pueblo estuviera de fiesta, los picós seguían allí, mientras nosotros, sentados en la puerta de la casa, escuchábamos cuentos y leyendas como la de Benkos Biohó o la de Catalina Luango. En esas se nos acerca el señor Fredman Herazo, palenquero, según leí el único historiador del pueblo y con muchos otros estudios, conocido entre otras cosas por ser presentador de las Alegres Ambulancias, a darnos la bienvenida al pueblo con la elocuencia que lo caracteriza. Me brindó un trago de contra, y nos contó, alegre porque personas como nosotros se interesan en su cultura, que en San Basilio de Palenque siempre seremos bienvenidos.

4 comentarios:

  1. Es fabulosa la forma con que describes tu estadía en Palenque, en estos momentos necesito información o un contacto de allá, si podrías colaborarme, te lo agradecería.

    Felicidades!

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  2. Me alegro que te haya gustado, podemos hablar por DM en twitter: @cao_miguel. Éxitos en tu viaje a Palenque!

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  4. Hola Carlos, bastante interesante su visita al Palenque, pienso viajar allá a finales de noviembre, podría darme alguna información de contacto por favor. Estaría profudamente agradecido.

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