28.10.10

Soldado a 3000mts

Mientras acá abajo estamos pasándola bueno, yendo a discotecas, buscando disfraz de Halloween y quejándonos de pendejadas, arriba, sobre las nubes, hay una cantidad de soldados luchando contra el frío y contra sí mismos.


A 3000 metros sobre el nivel del mar en un cerro de la Sierra, hay un campamento militar. Nos pusimos a hablar con un soldado de Barranquilla para saber sobre la vida a esas alturas, sobre su entrenamiento, cuánto tiempo le queda, qué hay de su familia. El panorama me dejó mucho en qué pensar. No diré el nombre ni mostraré su cara, las fotos estaban prohibidas para evitar infiltrados y situaciones de esas.

Y entonces llave, ¿cómo suben hasta acá?
S: Son tres días a pie, con el equipo encima, es teso compadre. Ahí llevamos de todo y eso pesa.

Compa, ¿cuánto tiempo acá y cada cuánto bajan?
S: Joda nos tocan dos años, con 15 días de vacaciones cada 4 meses. Y no nos pagan un carajo, como 70 mil mensuales. Son culo de duros, nos descuentan un poco de plata. Un policía de bolillito aguantando sol en una esquina gana más que nosotros.

¿Y qué situaciones se dan acá arriba?
S: Aquí no pasa mucho, estamos relajados aprovechando que no nos tocó en la selva. Aquí es más suave, dormimos en el cambuche. A esos manes les toca dormir en el monte, con lluvia y patrullando, esa vaina es dura.

¿Qué almorzaron ahorita hey?
Arrocito, frijolito y carnecita de vaca. A veces nos dan raciones de paquete, son buenas, de pollo y eso. Al que lave platos le regalan patacón o alguna vaina de ñapa.

¿Hey y si te pierdes en el monte, a uds. les enseñan como sobrevivir ah?
Ojalá me perdiera pa irme pa mi casa, pero qué va, eso da es problemas con la ley. A nosotros nos enseñan todo eso, nos enseñan a comer gallina y animales crudos del monte, esa parte del entrenamiento es fea.

¿Tu familia qué dice? 
S: Joda vale yo prefiero no llamar a mi familia ni pa cumpleaños, ni navidad, ni 31, pa que no lloren ni se preocupen, los llamo al día siguiente o cuando la fiesta esté ya acabándose.

¿Y pal aburrimiento qué?
S: A veces nos tiramos un partidito o jugamos cartas. Pero qué va, yo me quiero es ir pa mi casa, yo no sé pa qué me metí en esta vaina. Pensé que ibamos a aventurar pero qué va. ¿Está la vaina vacile en Barranquilla?

Aquí no supe qué decirle para no agudizar sus ganas de devolverse pa su casa. Escuché cuentos de soldados que se han suicidado allá arriba, tal vez de aburrimiento. No sabía si hablarle bacano o hacer como si no hubiera nada interesante en Barranquilla. Para ser neutral le hablé que los arroyos han hecho desastres y que ya se viene el Carnaval.

S: Joda el Carnaval, qué vacile.

Pa amenizar el momento, les pedimos una foto.


Entre otras cosas, allá arriba se valora mucho una simple gaseosa; te hacen favores a cambio de un mecato. Mientras esos manes pasan frío y tedio, y otros están en la selva aguantando lluvia, nosotros acá abajo nos quejamos de que no vienen más vainas de la yunai, queremos cosas que no tenemos y compramos pendejadas que no necesitamos, pensando que los soldados y la guerra pasan en un mundo aparte del nuestro. Pero no es así.

Cuando uno es soldado allá arriba, tiene bastante tiempo para pensar.

12.10.10

Abre los ojos

La lata de sopa Campbell's que usó Warhol, probablemente fue fabricada con el estaño de una mina en Bolivia, extraído, barato gracias a las vidas de mineros sin más opción que destruir sus pulmones en ese oficio, para mantener a sus familias.

El chocolate Suizo, probablemente se hace con cacao cultivado por esclavos modernos en alguna parte de la inmensa amazonia brasileña, al cual estarán atados de por vida.

La primera máquina a vapor que dió paso a la Revolución Industrial -que nos permitió vivir como vivimos- fue financiada por el dinero de tráfico de  millones de esclavos africanos y plantaciones en el Caribe.

Esos ejemplos resumen básicamente lo que ha sido y es Latinoamérica; una despensa que regala su mano de obra y sus productos a cambio de espejos  ilusorios y baratijas, y luego un mercado para vender sobras, desde 1492 hasta hoy, Día de la Raza

Tendremos un lunes festivo en el que nos vamos a emborrachar, sin saber -o sin querer saber- que estaremos celebrando el día que Colón avistó estas tierras y de paso selló el destino desafortunado que hoy vivimos como continente.

Piensa en eso cada vez que prefieras consumir estilos de vida -arte, productos, comida, música- foráneos sobre algo propio de nuestra manufactura nacional. Y empieza a pensar cómo ayudarás a retribuir las vidas que se pagaron y se pagan, para que puedas vivir como vives, comer lo que comes y usar lo que usas. Tienes más poder del que crees.